lunes, 18 de septiembre de 2006

Reseña Histórica del Programa

Nació allá por junio del ´96, debido a ciertas circunstancias que justificaron, en cierta forma, tan triste realidad. En principio, casi equivocando el camino, tuvo una estructura rígida y formal, pretendiendo ser un tributo a los Blues Brothers, con secciones fijas, medidas y ajustadas. La constante fue la difusión de música poco irradiada, y que había acompañado siempre a los responsables (¿?) del programa. Esta es la única característica que conserva hoy.
Con el paso del tiempo, dos o tres programas, encontró el rumbo, la informalidad y la comodidad de ¨dejar que sea lo que deba ser¨, lo convirtieron en una reunión de amigos alrededor del Winco, compartiendo música y charlando de cualquier tema, como si estuvieran en la pieza de alguno de ellos. En cuanto a la conformación del equipo, a lo largo de esta primera década de vida el ciclo supo contar con un integrante, dos, tres, cuatro, cinco, ¨que se yo, había tanta gente... y poca luz¨, y ninguno, en el mejor de los casos. Llego a emitirse en formato de una hora, hora y media, dos, tres, cuatro, y ¨toda una noche me estaría contigo¨; diariamente de lunes a viernes, los viernes, los sábados, los domingos, los sábados y domingos en dos radios distintas; de tarde o de noche.
Entre sus galardones obtenidos se podría señalar que inauguró una emisora, siendo su primer programa en vivo al aire, fue distinguido con el premio Ratel-K como mejor programa de Jazz & Blues en 1997 / 99 / 2001, contó con informes en directo desde distintos shows, como por ejemplo Eric Clapton en River Plate, por citar alguno. Sin embargo, los que consideramos más valiosos son, haber contado con un movilero en Longchamps, que llegó a vender casettes conteniendo las grabaciones del programa en la feria de Burzaco, y en distintos lugares de la zona Sur donde no llegaba la transmisión radial; músicos en vivo en el estudio y veladas con cena incluida. No obstante el mayor logro consiste en ostentar un record, imposible de igualar, nunca alcanzará el promedio de un llamado telefónico promedio, por año de permanencia en el aire.
La historia nos trae a este presente, tratando de demostrar ¨que veinte años no es nada¨, y nos encontramos con que sigue siendo lo mismo, sin signos de evolución favorable.
Vaya nuestro agradecimiento a la Fundación por la Defensa de los Derechos del Winco, en la persona del Reverendo Mc Pearson, autor intelectual de este proyecto.
Especialmente al equipo de producción, a Li por su asistencia emocional: al grupo paramusical Los Devoradores de Mantecol (Lucía, Sol y Juan), a la empresa T.U.M., a diversas remiseras y al Ferrocarril Midland por transportarnos cuando hizo falta y si alguien escuchó el programa alguna vez, también.
A las siguientes emisoras, que les dio no se qué decirnos que no, FM Galáctica, Estación de Radio, FM Universal, FM Comunitaria del Oeste y por supuesto, a Radio La Sede, nuestra casa en la actualidad, y que gracias a su señal, llegamos a todos los rincones del mundo a través de la Web, salvo a un iglú (chiste).
A todos los que pasaron por este espacio, Marcela Oslak, Maximiliano Valdez, Diego Alvarado, Lic. Chuperman, Nemesio Benitez, Johnny Martin, el Pato Coppola, Sebastian Colombo, Juan Alberto Samartín, Corvalán, Gregorio Fuentes: y a mi compañero actual Jesús Naranjo.
Lo expuesto hasta aquí, más el paso inexorable del tiempo hacen que el L.A. Blues, se convierta en el otro lado de la Radio, como el negativo de una foto, un espacio virtual y abstracto, que luego de ser escuchado, deja en el subconsciente la extraña sensación de incertidumbre sobre si ocurrió en realidad.